En la final se enfrentó al suizo y N.º 1 del mundo Roger Federer, enfrentándose por tercer año consecutivo en la final de París, y al igual que las 2 anteriores, Nadal se quedó con el triunfo, pero siendo este el más desequilibrado de todos sus partidos al vencerlo por un apabullante 6-1, 6-3 y 6-0 en solo 1 hora y 48 minutos, logrando ganar su cuarto Roland Garros consecutivo igualando el histórico récord de Björn Borg, único jugador que hasta ese momento había conseguido ganar 4 Roland Garros consecutivos, quien estuvo presente en la ceremonia y le entregó el trofeo al español, esta fue la mayor derrota de Federer en una final de Grand Slam y propinándole su primer rosco desde 1999, también ganando su cuarto trofeo de la temporada (todos en tierra batida) y en 3 de ellos venciendo a Federer en la final.